¡¿WTF?!

Todo el mundo sabe que hay cosas en el hogar que son para que las usen los hombres; como por ejemplo: equipos de audio de 123 canales, televisores satelitales de 1234 canales, computadoras pentium 5 triple core penta turbo, etc.

Hay por supuesto otras que son para las mujeres: planchas con selectores para 25 tipos diferentes de planchado, máquinas de coser que bordan, pegan botones, tejen, y hasta te hacen zurcidos invisibles; y no hay que olvidarse de los complejísimos lavarropas automáticos, que de automáticos no tienen nada, porque hay que saber, entre otras cosas, cuánta ropa y de qué tipo se pone y cómo se la quiere lavar, además de saber qué ropa va con cuál para que no destiñan, etc.

Como por estas tierras en poco tiempo más celebraremos el día de la madre -tercer domingo de octubre-, se me ocurrió comprarle (de parte de mis hijos, ofcors) un electrodoméstico a mi esposa.

Ya que tengo un hipermercado Wal Mart cerca de casa, me di una vueltita por la parte de electrodomésticos para ver lo que le podía regalar.

Quedé tan confundido con las nuevas tecnologías, que ahora no tengo ni la más pálida idea de qué puedo comprarle.

Me gustaría saber qué opinan ustedes sobre qué puedo regalarle. He sacado (casi robado) unas fotos para poder pedirles a ustedes que leen mi página un consejo.

¿Exprimidores, tal vez?

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Licuadoras no estaría nada mal, me parece.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Podría ser una nueva plancha, por ejemplo.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Una buena aspiradora es otra de las opciones.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

O un buen horno a microondas.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

Click en la foto para ampliarla.

En realidad, me encuentro tan confundido que ya no sé siquiera si quiero regalarle algo.

Aunque mis hijos me tranquilizaron diciéndome que quizás no sea yo el único que está «algo confundido».

Y si pasa algo… ¿a quién le reclamo?

Tere hace pocos días estaba por Barrio Norte y pasó por una galletitería (¿se acuerdan de cuando en el barrio siempre teníamos una?) y le agarró un ataque de nostalgia y entró a comprar galletitas.

Aclaro que en las galletiterías no sólo vendían galletitas; también tenían alfajores, cubanitos, y un montón más de delicias para cualquier chico.

Ya no tienen más estantes con las latas con la ventanita circular de vidrio, a través de la que podíamos ver lo que había dentro y tentarnos. Ahora todo está embolsado.

Compró tres o cuatro bolsitas de diferentes galletitas y una de ellas era de biscuits (las únicas que conocía eran las Bay biscuit, o baibiscuí, como le decíamos).

Nunca me gustaron. Por supuesto, cuando puso la bolsita en la mesa yo comí de otra clase.

Un rato más tarde, y mirando distraídamente la bolsita de los biscuits, algo me llama la atención: RNPA: en trámite.

Luego de pensar un ¡caramba!, todavía no se inscribió en el Registro Nacional de Productos Alimenticios y ya puede comercializar sus productos, agarré la bolsita y la giré para ver quién lo fabricaba.

¡Nadie!

Y éso no era lo más pior…

Decía además: RNE: no identificado.

No estaba identificado en el Registro Nacional de Establecimientos.

¡Son re-truchas!… miren el código de barras: 0000000008129.

Vean la foto que le saqué al paquetito:


Click en la foto la amplía.

Después de ver todo esto, me surgen algunas preguntas:

1.- ¿Quién fabrica este producto?
2.- ¿Cómo puede comercializarlo?
3.- ¿Es legal todo esto?
4.- Si me intoxico, ¿a quién le reclamo?
5.- La legislación argentina, permite la comercialización de productos alimenticios en estas condiciones?
6.- ¿Habrá mucha comida envasada en similares condiciones?

¡Socorro!

Me siento desamparado.

¡Tiemblen, usuarios de Yahoo!

Para quienes tengan una única dirección de correo y sea ésta de Yahoo, piensen que lo que todavía es gratis, ilimitado o lo que tengan, puede dejar de serlo.

A Yahoo las cosas no le van como esperaba, y parece que hay quien quiere darles una mano y comprarles la compañía.

Por la módica suma de 44,6 mil millones de dólares, Microsoft quiere quedarse con Yahoo.

La competencia en el rubro buscadores y correo electrónico desespera a Microsoft, que está viendo que Google está revolucionando conceptos que Bill Gates había establecido: «Nunca serán los verdaderos dueños de nada, deberán pagar por programas, actualizaciones, upgrades, extras, etc. de por vida».

Cuál terminará siendo el destino de Yahoo en manos de Microsoft, para mí, es un verdadero misterio. No son de los que dan nada gratis; ni siquiera barato.

Esperemos que prevalezca a nivel mundial el concepto de gratuidad.

Caso contrario, volveremos a la hoja de papel + sobre + estampillas…

La nota en el New York Times pueden verla -en inglés- aquí.

¡Cuánta honestidad!

Podemos quejarnos de los supermercados, de los precios, de que nos cambien de lugar la mercadería periódicamente, de desabastecimiento, de precios engañosos…

Pero la gente de Wal Mart es honesta.

Si te conviene comprar en la competencia, te lo dicen sin tapujos. Hace unos instantes, pude comprobarlo:

En la competencia es mas barato

¿Te acordás?… Yo sí

Cris me mandó un mp3 con la advertencia de que me preparara para el lagrimeo.

Es la voz de Mario Pergolini leyendo algo que escribió junto a Eduardo De la Puente.

No quiero parecer nostalgioso, ni llegar a decir «en mi época era mejor».

Pero si tuviera que elegir, no dudaría ni un segundo en elegir «lo que hice», antes que «lo que podría hacer ahora».

Pueden escucharlo

y leerlo

¿Te acordás?

¿Te acordás de aquel tiempo en que las decisiones importantes se tomaban mediante un práctico «Ta Te Ti suerte para mí»?
Se podían detener las cosas cuando se complicaban con un simple «pido gancho!» Sigue leyendo