Salud, Dinero y Amor

La canción dice: … «tres cosas hay en la vida, salud, dinero y amor; el que tenga esas tres cosas, que le de gracias a Dios»

Están los que no tiene ninguna de los 3; otros tienen una, los menos tienen 2 y no sé si habrá quien las tenga todas.

Stephen Smith (58) tenía sólo una: amor. El de su esposa.

Acaba de ganar la lotería del Reino Unido. £19.000.000.= (diecinueve millones de libras esterlinas), que son unos 25 millones de euros o 37,8 millones de dólares estadounidenses.

¡Bravo!

Tiene amor, que seguramente es verdadero, porque no era por dinero. Acaba de volverse lo suficientemente rico como para no pasar nunca más sobresaltos y podríamos suponer que con semejante cantidad de dinero, podría pagar cualquier tratamiento que necesite, por lo que la salud, mal que mal, la podría tener asegurada…

Pero sucede que Stephen Smith ofrece toda su fortuna a quien pueda devolverle la salud.

Tiene una rara enfermedad que no tiene cura y que podría llevarlo a la muerte en cualquier momento.

Padece de un aneurisma aórtico que puede provocarle la muerte por hemorragia interna al rompérsele los vasos sanguíneos. Las estadísticas indican que apenas 1 de cada 10 puede llegar a salvarse luego de un episodio.

Pueden ver que «el dinero no es todo».

Si tuvieran que elegir 2 de 3, ustedes, ¿qué elegirían?

Ahora que estoy terminando el post, recuerdo que en agosto de 2004 puse otro en donde comentaba que otro inglés había ganado en la lotería 7 millones de libras, pero estaba preso con cadena perpetua.

O ser inglés trae mucha mala suerte, o el dios que ellos tienen, tiene un humor muy negro.

La noticia del premio que ganó Stephen Smith la pueden leer en el país.com haciendo click aquí.

El traje del emperador

Extraído de Antología de cuento y poesía/5 XIII Concurso Leopoldo Marechal.

ISBN 978-987-98796-6-5

2007, Dirección de Arte y Cultura
Municipio de Morón

Segundo Premio. (Poesía)

de Tamara Soledad Rutinelli

Sin título

blanco caracol suspendido en lo alto bucea una ventana abriendo el cielo horizonte pálido del tiempo. Límpido el color de los sueños el silencio ese no color de la espera o poema deshabitado. Y luz de tu ojo o cerradura por donde se cuela la noche del olvido la muerte o la perfecta apertura de mi cuerpo en sombras caracol que emanas. Centro de esa noche boca amarga o dulce de la hora que sangra

Quiero aclarar un par de cosas:

No puse el primer premio o el tercero, porque están escritos en un formato parecido a lo que yo siempre conocí como poema: frases cortas, escritas una debajo de la otra, con una cierta rima o cadencia, que llevaba a leerlos con un cierto ritmo.

Pero como los distintos párrafos comienzan a diferentes distancias del margen izquierdo y con WordPress no puedo manejarlo correctamente, elegí el del segundo premio porque así estaba escrito.

Los únicos signos de puntuación son los tres «punto y seguido» que he puesto. El ¿poema? no termina con un punto final.

Estoy seguro de que si llegase a encontrar algún poema escrito por algún poeta famoso y participara con esa obra inédita, no quedaría ni siquiera preseleccionado.

No importa si fuera una obra de Becquer, Darío o Machado. Seguramente los descartarían.

Siento que por la ausencia de verdaderos poetas, se fue bastardeando la poesía, hasta llegar a las obras que ahora se publican.

Es una apreciación personal, pero siento que puedo decir desde mi «inocencia intelectual» que el emperador está desnudo.

Es evidente, pero nadie se anima a decirlo.

Estos deportes me tienen cansado

¿Deportes de alto riesgo? ¿te encanta transpirar la camiseta y eliminar toxinas? ¿sos capaz de tener control total sobre todos tus músculos? (por lo menos los de la cara y el esfínter)… Sigue leyendo