No le encuentro un título

Participé de un concurso de relatos breves, de hasta 100 palabras hace un par de años, tal vez más.
Conseguí hacerlo de exactamente cien palabras, pero no alcanzó con ese esfuerzo para quedar preseleccionado.
Podría ponerle un título «muuuy obvio», pero delataría el final.
Quedará sin título.

Como me gustó, lo posteo.

Allí está….

Orgullosa en su hermosura, finge, o al menos eso creo, que no me ve.

Ya no quiero aguardar más.

Me coloco como para que me vea.

Que sepa que quiero seducirla.

Con una mezcla de calma e impaciencia, comienzo a acercarme.

El deseo ha conseguido eliminar todos mis temores.

Me aproximo y consigo llamar su atención.

Es evidente que no va a rechazarme.

Se me acerca voluptuosa, magnífica.

Sin dudarlo me pego a su cuerpo.

Me desea.

No esperamos más.

Sin más preámbulos tenemos sexo.

Me relajo.

Grave error que descubro tardíamente.

Por algo la llaman Viuda Negra.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *