La xenofobia es redituable

Hay momentos en los que no sé si sorprenderme, maravillarme o espantarme de la capacidad que tienen algunas personas de mostrar lo más despreciable de la conducta humana como si fueran valores por demás elevados.

Cuando uno escucha hablar de universidades con fama, la de Harvard siempre está en la lista en los primeros lugares.

Lo que no es tan evidente, es que no por ser una universidad de fama académica o con una buena publicidad (con el cine su nombre se ha popularizado en todo el mundo), quienes integran su staff no tienen por qué tener ideas correctas.

No estoy hablando de los teóricos en física, física cuántica, astronomía, sino de los filósofos, economistas o simplemente teóricos.

No he tenido la oportunidad de leer nada de Samuel Huntington. La única referencia que tengo de él es que estaba por lanzar un nuevo libro, en el que predice la muerte del sueño americano.
Huntington Harvard

¿Sueño americano?

¿Acaso América toda tiene el mismo sueño?

No lo creo.

Un continente tan grande, con culturas aborígenes tan disímiles, con un pasado de invasión española, portuguesa, francesa e inglesa, ¿puede tener una única meta, un único deseo?

No.

Me parece que lo que este señor Huntington, académico de Harvard quiere decir, es que lo que «está en peligro» es el sueño norteamericano.

No voy a hablar aquí de la famosa frase América (toda) para los (norte) americanos. Lo dejaré para otra oportunidad.

Cuando este sujeto «siente» que los anglo-sajones corren el riesgo de sufrir cambios sociales, culturales y morales a manos de unos no-anglo-sajones, creo que está dejando escapar su sentimiento xenofóbico.

Estos invasores hispánicos – dice él – son incapaces de adaptarse a las costumbres de su país (me refiero al país del señor Huntington), por lo tanto, van a contaminar su cultura, probablemente socavando sus cimientos, para que llegue el día en que «tan maravillosa cultura» caiga.

Dos consideraciones:
1.- Si fuera tan buena, no tendría por qué temer que otra cultura inferior la desplazase.
2.- Su cultura, en Irak, ¿no está haciendo lo mismo? ¿Acaso las tropas invasoras norteamericanas (entre otras, pero las más) se están adaptando al estilo de vida musulmán?

Para no ser ofensivo, lo menos que puedo decir de éste sujeto, es que o es un cínico o un idiota que no es capaz de ver no ya una viga, sino todo un bosque en su propio ojo.

Cuando veo o escucho a un individuo hablar del peligro que representa otra raza o cultura, me pregunto: ¿son razas o culturas caníbales?, ¿acaso violentas?.

Hasta donde tengo conocimiento, el país de don Huntington es el que ha peleado guerras en países cercanos y lejanos, no los países de estos «invasores».

Tienen un buen récord: han atacado países en casi todos los continentes.

Ahora que estoy tipiando ésto, me asalta una duda: ¿será este hombre un indígena?, porque en ése caso, sí podría hablar de una cultura «americana»; caso contrario, él pertenecería a los invasores que eliminaron el «verdadero sueño americano» – ver la carta del indio Seattle para tener una idea más acabada de lo que quiero decir -.

Claro que los choques entre culturas traen cambios, éso lo sabemos todos. Pero no hay que confundirse, porque cuando se dice «choque» no quiere decir un encontronazo violento, sino que puede ser un acercamiento, en donde ambas culturas comparten y adoptan costumbres, hábitos, estilos de vida que terminan generando una nueva cultura con lo que la gente consideró que era lo que más le gustaba de ambas. Sin la fuerza ni la opresión, ninguna de las dos puede obligar a la otra a emprender una retirada.

Yo no me preocuparía por salvaguardar una cultura que consideraba que los negros no tenían los mismos derechos que los blancos, y por lo tanto, no tenían ni siquiera derecho al voto. Y de ésto no hace mucho…

Huntington tal vez crea en Jesucristo, ¿tendrá miedo de la «invasión judía» que no cree en «el hijo de Dios»?

Un gobierno decidido a luchar contra el mal, hoy personificado por los musulmanes, ¿descubrirá en un futuro que el mal está entre la gente que habla un idioma latino?

Huntington Harvard

Hitler consideraba peligrosos a los judíos, los gitanos y los negros.

Japón veía a los chinos de la misma manera.

Los hutus hacen lo mismo con los tutsis.

Lo hicieron los españoles, franceses, portugueses y anglo-sajones con los indígenas americanos.

Siempre fue una buena excusa para sojuzgar pueblos. No creo que éste «teórico de Harvard» sea tan ciego. Creo que es otro hijo de puta más.

Nota de Clarín

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